jueves, 31 de agosto de 2017

Hijos Adoptados

Revista 'Maestra Infantil'
Por Ana Roa García; Psicopedagogía y Maestra de Educación Infantil.


Nuestros temores ante un hijo adoptado

Cuando adoptamos un bebé o aun niño, hablamos de tomar una decisión compleja que no podemos plantearnos a la ligera. La adopción implica de manera consustancial tiempo, voluntad, preparación previa y dinero. Es una aventura para la que ambos miembros de la pareja deben  estar totalmente convencidos y muy preparados para afrontar determinadas situaciones conflictivas que sobrevendrán.

En la mayoría de los casos, la decisión de adoptar un niño llega después de la aceptación dolorosa de una esterilidad y de un hijo biológico que no llega.

La adopción es muy diferente del embarazo. Las dudas y temores de la pareja van desde plantearse ser padres de un niño que biológicamente no es suyo, hasta el temor de saber conectar emocionalmente con él, acompañado del desconocimiento geográfico y social de sus orígenes. Se trata de un embarazo 'psicológico' de alto riesgo en algunas ocasiones.

Los retrasos debidos a un 'embarazo' producto de la burocracia.

La espera de un hijo adoptado no ofrece las mismas sensaciones de placer y de felicidad que los nueve meses de embarazo biológico. La ingente cantidad de trámites, el papeleo, la burocracia y las largas esperas con escasez de noticias describen un camino  arduo en el que la pareja tendrá que concienciarse emocionalmente para 'no tirar la toalla'.

Preguntas sobre la adopción

¿Qué personas pueden adoptar?

Son muchos los factores que determinan este hecho. Algunos países exigen que los solicitantes formen un matrimonio con algunos años de convivencia, otros aceptan personas solteras  o parejas de hecho. También son determinantes la edad, el perfil psicológico y la situación económica de la pareja.

¿Qué significa adoptar plenamente?

La adopción plena rompe cualquier tipo de vínculo personal, familiar y jurídico entre el hijo adoptado y sus padres biológicos. El hijo adoptivo se convierte en hijo, como cualquier otro, de los nuevos padres. En algunos países la adopción plena es un poco más lenta, pero se constituirá a través de un procedimiento judicial. 

¿Qué ocurre al niño/a dado en adopción?

Los niños que se adoptan tienen un pasado que incluyen una serie de vivencias en su país de origen. Estas experiencias pueden ir desde un abandono en el nacimiento hasta malos tratos o el paso por diferentes centros de acogida u orfanatos; todo ello repercute en la salud física y mental del niño, cuya recuperación está sometida a varios factores. 

¿Qué edad suele tener?

El abanico de posibilidades respecto a la edad es muy amplio, abarca desde los primeros meses de ida hasta la preadolescencia.

¿Qué es el certificado de Idoneidad?

Es un documento expedido por el órgano competente de cada Comunidad Autónoma y que capacita a los adoptantes para hacerse cargo  del menor en adopción. Corrobora la estabilidad personal, familiar y económica de los futuros padres en adopción internacional.

¿Cuánto cuesta adoptar?

Los gastos son muy diversos, tanto en la cantidad como en la índole. Incluyen tramitaciones, tasas, legalizaciones y traducciones de documentación, viaje y estancia en el país de origen del niño e incluso 'donativos' a los orfanatos. Se podría dar una aproximación que oscilaría entre 15.000 y 18.000 €. 

¿Cuánto tiempo dura un proceso de adopción?

Actualmente, el tiempo de espera, una vez tramitados todos los papeles, se está ampliando. Antes era necesario esperar uno o dos años, pero ahora ese tiempo se plantea casi como el de la espera. El Certificado de Idoneidad necesita algunos meses, la confirmación de la adopción también, la autorización de la recogida del menor y la estancia en el país de origen también suman.